viernes, 3 de agosto de 2012

Te preguntaría sí te han besado la espalda como yo te la beso... Pero sería de mala educación hacerlo...

Un caballero como yo no recuerda esas cosas, pero para ayudarte a hacer memoria paso mis manos que suben y mis manos que bajan... inoc
entemente por si no te acuerdas de nada…

Un campamento entre tu ombligo, es lo que deberíamos montar... mi morbo y yo... Y recorrer los pasos que pasan por tus ingles a ver a donde nos llevan...

Seguir jugando así es avivar mis incendios y nada más inflamable que tu remordimiento tal vez fingido... tal vez no y mi imaginación volátil, que viene y que va...y tu espalda que sigue igual, tan canela tan tuya… tan mía en algunas días sin minutos y sin horas.

Yo sé que esos dos o tres ex-novios tuyos no te besaron como se debe... Y tranquila que no es nada del otro mundo esos escalofríos tuyos, sólo es mi lengua en complot contra tus poros...

Y uno y dos y tres... es difícil acoplar mis caricias a tu respiración... más de lo que parece, si tan solo mantuvieses el ritmo, es difícil... respiras como una montaña rusa y sorpresa, mi boca controla tu velocidad.

Te preguntaría sí te han besado la espalda como yo te la beso... pero un caballero no pregunta esas cosas...y honestamente, tampoco me importa..............

No hay comentarios:

Publicar un comentario